viernes, 26 de febrero de 2010

¿Cómo se pueden manejar las emociones y generar drogas endógenas de Placer, Felicidad y Amor?


El primer paso, es  comprendiendo el funcionamiento de nuestra Unidad Cuerpo Cerebro Mente (UCCM) y el rol que juega el contexto y la epigenética en nuestros estados emocionales.  Todos creemos que sabemos por qué hacemos y no hacemos algo, o  por qué el otro lo hace usando el sentido común, pero éste sin buena información, con falta de información, o con una de mala calidad, no puede interpretar correctamente las situaciones, frenar respuestas emocionales inadecuadas ni generar emociones placenteras.

La auténtica felicidad  no sólo es posible, sino que ­lejos de depender de la suerte y de los genes  puede cultivarse identificando y utilizando muchas de las fortalezas y rasgos que ya se poseen. Así que aplicando las “fortalezas personales” en los ámbitos cruciales de la vida, no sólo desarrollaremos protecciones naturales contra el infortunio, la depresión y las emociones negativas, sino que podremos situar nuestras vidas en un plano nuevo y más positivo. Al identificar lo mejor de nosotros mismos y desarrollar esos aspectos, podemos mejorar sensiblemente nuestra vida y la de cuantos nos rodean.

La construcción y  logro de Neurofelicidad debe presentarse como un objetivo posible, en nada diferente de otros objetivos que la persona pudiera plantearse. Al igual que cualquier otro objetivo en la vida, la persona que mayores oportunidades tiene de alcanzarla es aquella que piensa en su objetivo y que lo ha analizado exhaustivamente, aquella que realiza mayores esfuerzos y aquella, que sobre todo, posee una información acertada sobre el modo de lograrlo. Nuestras formaciones en general y la que impartiremos en el 2011 en particular: NEUROFELICIDAD – Mitos y realidades, aportan dicha  información, y las herramientas. El análisis y el esfuerzo quedan, en adelante, en manos del participante